Es común que las empresas tengan asuntos complejos en su gestión contable, en sus necesidades o en el cumplimiento de las disposiciones legales. Es por eso que su compañía puede estar pensando en contratar expertos para tener ya sea una asesoría, o una consultoría contable, y aunque muchas personas usen estos dos términos como sinónimos, consideramos importante que conozca las diferencias entre cada una para que pueda determinar lo que su compañía necesita.

Podemos empezar mencionando que la consultoría es considerada como un proceso para ayudar a una organización a encontrar problemas específicos y llegar a las soluciones necesarias. Una asesoría es un poco más general, pero de más acompañamiento. Lo ayudará a revelar situaciones complejas siempre que lo necesite y lo conducirá hacia quien pueda ayudarle a resolverlas, preparará los documentos contables, pero quien soluciona problemas más específicos es el consultor.

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Consultoría

Un consultor es un solucionador. Si buscas un experto contable para hacer una consultoría, lo primero que hará es buscar las raíces de cada situación difícil que pueda presentarse en tu compañía y luego lo ayudará a resolverlas desde estos causantes. Ahora bien, su permanencia en la compañía suele ser corta, ya que procura limitar su trabajo a la resolución de situaciones complejas.

Los consultores suelen brindarle soluciones más específicas y que puedan seguir funcionando cuando ellos hayan terminado su trabajo. Se trata de solventar problemas muy difíciles, pero que una vez solucionados, ellos puedan apartarse. La independencia de un consultor cuando se trata de hacer auditorías contables, por ejemplo, suele ser muy importante para la credibilidad en los reportes financieros de las empresas públicas.

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Asesoría

Cuando se contrata un asesor, tendrá un acompañamiento en situaciones que puede que no sean tan complejas, pero que sí se presentan frecuentemente. Se trata de los primeros expertos en conocer la situación contable, prevenir problemas e identificarlos. También le brindarán diferentes consejos no sólo para la resolución de problemas, sino para el descubrimiento de nuevas oportunidades, recursos y servicios.

Los asesores suelen tener una permanencia en la organización mucho más larga que la de un consultor, ya que su trabajo es conocer la compañía, su situación financiera y ayudar continuamente con estos conocimientos. No se enfrenta a problemas específicos o profundos, pero sí a retos constantes y no tan complejos. Son expertos un poco más estrategas, más allá de solucionar problemas, lo que hacen es crear estrategias de prevención de los mismos. Conocen las metas de su compañía, se enfocan en brindar soluciones dirigidas a estos objetivos. Los asesores suelen involucrarse más en todo tipo de toma de decisiones. Ayudan a la organización con mejoras de procesos o en rendiciones de cuentas.

Ahora que ya conoce la diferencia entre estas dos figuras para brindar soluciones contables y financieras, no dude en consultar una firma contable y asegurar el mejoramiento de su compañía. Es importante poder contar tanto con asesores, como con consultores, ya que pueden ayudarlo con diversas situaciones. Si desea conocer más soluciones de outsourcing contable y otros servicios de consultoría contable y financiera, ingrese a la página de la firma LeGap y consulte con expertos los diferentes servicios que le ayudarán a mejorar su compañía.